El milagro del Levante

Poca gente entiende lo que significa para un equipo como el Levante vencer al Real Madrid. Mucha menos gente entiende como clubes tan modestos ligados a barrios humildes de la capital (Rayo Vallecano), o de la zona de Orriols, en Valencia (Levante) se pueden codear con los grandes del fútbol español. Real Madrid, FC Barcelona, Valencia, Sevilla o Atlético de Madrid tendrán que visitar clubes modestos, que no representan a capitales de provincia. A veces tan siquiera ni capitales. como el Villarreal o el Getafe. Otras tan siquiera equipos que representan a ciudades, como el Rayo Vallecano o el Levante.

Si los milagros existen, éste es uno de ellos. El Rayo Vallecano es más cercano a mí, pero ha tenido fuerte presencia en la élite española en los últimos 20 años, en los que ha visitado la Primera División en varias ocasiones. Y por ese detalle, quizás de cercanía, quizás de rivalidad local, ignoro o desconozco la dimensión real del mérito de un equipo que reside en el distrito más grande de Madrid (Vallecas). Tan grande que se tiene que dividir en dos distritos a su vez, Puente de Vallecas y Villa de Vallecas. Con todos los problemas económicos que sufre, logra competir en Primera División de nuevo, y de momento lleva 5 puntos en 4 partidos, algo que no está nada mal para un equipo que si logra la permanencia alcanza un exitazo descomunal ante las dificultades. Ya no hablo del líder en solitario, el Betis, recién ascendido y en problemas económicos (pero en Sevilla, con una tremenda afición, en una gran ciudad, y el soporte de media provincia).

Pero hace dos semanas comprobé el tremendo esfuerzo que hace el Levante por subsistir en la Primera División Española. Visitar Valencia, visto desde el plano futbolístico, supone el glamour de un equipo que juega la Champions, que es segundo ahora mismo, que está reconstruyéndose con el apoyo de una gran masa social, de un poder más acentuado en las Instituciones Públicas, y que cuenta con un amplio despliegue informativo. Aparte de un Estadio en Construcción, y del que se espera pronto pueda volver a ponerse en marcha para finalizar las obras.

Pero también supone comprobar la modestia en la que se mueve el Levante. Con una pequeña masa social, con una gran estructura interna, con una organización que ya quisieran para sí muchos de los grandes clubes de Europa, con una de las mejores webs de la Liga BBVA. Y con un equipo de fútbol repleto de perros viejos, de expertos en la materia de sufrir, pelear y resistir hasta mantenerse. Véase una lista que maneja nombres cómo Juanfran García, Sergio Ballesteros, Asier Del Horno, Barkero, Farinós, Munúa o Javi Venta. Tipos que han disputado Champions, jugado en Campeonatos Extranjeros, que han ganado títulos, hoy pelean y sueñan por mantener al Levante UD otro año más en Primera División. Igual que un día por allí se dejaron caer grandes cracks mundiales como Johan Cruyff o Pedja Mijatovic. También hubo lugar para otros grandes como Fco.Jose Molina, portero del doblete en el Atlético del 96, o Damiano Tomassi, centrocampista decano de la loba capitalina, el AS Roma. Incluso un buen día, se dejaron caer por allí jugadores de la talla de Vicente Rodríguez Guillén, o un imberbe Sergio García, que explotaba en Primera, recién salido del horno de la Masía, con su look más cercano a un chico de barrio próximo al más profundo pokerismo que a un futbolista de calidad que años más tarde sería Campeón de la Eurocopa de 2008. Si alguien quiere un ejemplo de organización, aqui hay uno.

http://es.levanteud.com/noticias/levante14450.html

Con esta campaña, ya son 7 las temporadas que ha disputado el Levante UD en la Liga BBVA. 5 en la última década. La fama de equipo ascensor de los granotas entre la Segunda División, Segunda B y Tercera quiere acabar pronto. El Levante quiere mantenerse en Primera División por segundo año consecutivo, algo que nunca antes se ha dado en la historia del club. Un club humilde y modesto. Dar una vuelta por el añejo Ciutat de València, puro cemento y hormigón, y en muchas partes inacabado, dejando al descubierto sus tristes entrañas., es el ejemplo de la humildad en la que vive este conjunto, al que su ex técnico Luis García Plaza definió como una gran familia. Exactamente, una gran familia unida. Pocos equipos cuentan con una afición tan fiel. A pesar de escasa, que casi nunca logra llenar los 25.000 asientos del Ciutat de València, ni siquiera cuando el Real Madrid les visita. La afición siempre está ahí. Un ejemplo de fidelidad en todo momento. Porque ser del Levante en Valencia es muy complicado.

De cada 10 niños, 9 llevaban la camiseta del Valencia por 1 la del Levante. En mi estancia en Valencia, tan sólo ví a 3 personas con camisetas del Levante, 3 niños que no llegaban a los 15 años, pero que han visto a su club en una de sus mejores épocas históricas, codeándose con los grandes del fútbol nacional, incluso atreviéndose a dar grandes campanadas y vencer en grandes escenarios. Ya lo logró el Levante hace 4 años, venciendo al Real Madrid por 0-1 con un tanto solitario de Salva Ballesta. Ya lo hizo con el Atlético de Madrid el año pasado, ganándole 2-0 en el Ciutat. Y lo ha vuelto a hacer este año, venciendo al todopoderoso Real Madrid de la era Mourinho, versión 2.0. Dicen que era la versión mejorada del Real Madrid, pero dicen. En Valencia aún se preguntan donde está la mejora de un equipo que prefiere fichar a Altintop y Coentrao por el mismo precio que fichas a Sergio Agüero.

Todas las crónicas hablan de la debacle madridista, pero nadie habla de lo que supone para el Levante una victoria así. Es un hito para un club tan humilde como este. Ver a veteranos curtidos en mil batallas celebrar la victoria ante el Real Madrid en la 3º jornada de liga como si fuera la final de la Champions dice mucho más que la rueda de prensa de Mourinho y sus titulares acusando arbitrajes, a Khedira, o a la biblia en verso de una conspiración judeo masónica contra él, contra el madridismo, y contra todo lo que se menee que huela a colonia y lleve una camiseta blaugrana con la bandera catalana y gane muchos títulos, o en su defecto, que The Special One siempre cae bien a todo el mundo y hay desaprensivos que no lo entienden por las malas o por las muy malas. O simplemente pasaban por allí y a Don Jose y a Don Pepito les dió por atacar ferozmente, unos con dardos envenenados y otros con ataques de locura transitoria. Pero el centro de la noticia era la tremenda victoria del Levante UD con sus armas ante el poderoso Real Madrid. No otra.

El sueño de un humilde club centenario prosigue. El Levante busca ese tercer año en Primera con ahínco. Ya tiene 8 puntos en 4 jornadas, lo que de le da un buen respiro de cara a futuros apuros clasificatorios. Ya tiene a un buen grupo formado, a pesar de la pérdida del crack ecuatoriano Caicedo y piezas importantes como Sergio González, Manolo Reina y etc. etc. Y lo que es más importante, la confianza y la ilusión de una afición que desea ver a su equipo entre los 20 mejores de su país, en un cuento de hadas que nunca debería acabar.

P.D. - Hoy es un buen día para ponerme mi polo del Levante.