jueves, 15 de diciembre de 2011

Análisis simple de la crisis del Atlético

Sin ahondar en las caúsas o no de la marcha del equipo. Puestos a diseccionar por encima lo que está ocurriendo en la última semana en el Atlético de Madrid, que pierde lejos del Calderón lo que tanto esfuerzo le cuesta ganar en su casa. A saber qué es realmente lo que no le hace funcionar a este equipo, a pesar de la fuerte inversión (condicionada por las grandes ventas realizadas), de los grandes fichajes. De que el Atlético tenía al canalizador de juego que quería (Diego). Y que otro año más el objetivo era pelear por entrar en Champions, y la gente lo creyó a pies juntillas.

 - Punto 1: Manzano


Era la cuarta opción para sentarse en el banquillo del Atlético. Tras Luis Enrique, Caparrós y Benítez. Pero ninguno quiso. La culpa no es de Gregorio Manzano, desde luego. La culpa de que entrenadores de prestigio prefieran no entrenar a manchar su curriculum en el Atlético de Madrid no la tiene Gregorio Manzano. A partir de ahí. La confección del equipo. Seguramente no es el equipo que quería Manzano, o que tenía en mente. Ni algunos jugadores ni el esquema. Pero es lo que hay, y le toca trabajar con ello, puesto que para eso le pagan.

A partir de esos dos detalles importantes en la planificación deportiva errónea del dúo bicefálico que mayor jaqueca ha generado a un club español en un cuarto de siglo. Manzano viene porque ni el candidato de Gil Marín ni el de Cerezo quieren venir, nadie quiere ser víctima de una bestia de dos cabezas, y una tercera que se come los marrones. Caminero acepta el marrón y busca una tercera vía. Manzano acepta. Sabe lo que hay.

Hay cosas cómo que el equipo no está trabajado en muchos aspectos. En las jugadas de estrategia ofensivas se depende mucho de la capacidad de Falcao para marcar o generar ocasiones. El equipo nota la presencia del colombiano o no, y las alternativas a las ausencias de Falcao son pocas. El equipo se desconecta de los partidos con facilidad, entra tibio a los partidos, y fuera de casa no logra dar la sensación de mando que requiere un equipo que aspira a entrar en Champions League.

Decisiones, alineaciones y cambios son muy discutibles. Totalmente discutibles. La gestión del caso Reyes comienza a ser muy sospechosa cuánto menos por parte del jienense. La diferencia de conceptos y seriedad que transmite el primer equipo al filial, que cómo colectivo parece mucho más hecho, aunque sea bisoño, que la primera plantilla no deja en buen lugar a Manzano. Tampoco la tibieza con la que se ha empleado hasta ayer, dónde sacó carácter y fortaleza para decir que ahí está él, y que aunque le den el ultimatum de tres partidos, se ve capaz de resolver y reconducir la situación del equipo y llevarla a los objetivos propuestos. Así sea Don Gregorio, por el bien común de todos, y el general del Atlético, pero aprenda de sus errores y transmita energía al equipo, a la dirigencia y a la grada. Y transmita las ideas al campo. Y si no es capaz de hacerlo, lo mejor es que se vaya honestamente a su casa.


- Punto 2: Los jugadores


Caso Reyes: Manzano lo está llevando mal. La situación ha degenerado en un enfrentamiento público y sin caretas entre el técnico y el futbolista. Lo que parecía que quedaría en un castigo de uno o dos partidos en la grada y a jugar, se ha convertido en el caballo de batalla de cada día del técnico. El futbolista no se siente a gusto con Gregorio Manzano, y quién salga de la entidad en los próximos días será el señalado por todos en el conflicto, porque el perjudicado será el Atlético de Madrid, en cualquiera de los casos. La inestabilidad de un nuevo entrenador con ideas nuevas en mitad de temporada, o la salida de uno de los referentes de la plantilla, uno de los pocos grandes héroes que quedan del 12 de mayo de 2010. Reyes parece dispuesto a hacerle la vida incómoda a Manzano. Y Manzano igual.

Hay otros jugadores cómo Godín o Assunçao que no parecen contentos con Manzano. Tampoco la cantera rojiblanca. A excepción de  Pedro y Manquillo, los canteranos cómo Koke, Pulido o Joel han quedado relegados a un segundo plano, cuando el equipo ha necesitado nuevos aires, o no han entrado en la política de rotaciones de Manzano. Se extiende la leyenda popular de que hay un grupito de jugadores dispuestos a hacerle la cama a Manzano, descontentos con el técnico. Pero eso es un rumor y algo difícil de demostrar, si no es a través de la actitud de muchos en los partidos.

Y hay otros muchos jugadores que no tienen nivel para estar en el Atlético de Madrid, pero lo están. Las comisiones, el negocio, los favores. Jugadores sin nivel que año tras año pasan por el Vicente Calderón, sin nivel para cumplir con las exigencias del club. El técnico les hace el favor de ponerlos para su promoción, pero su nivel deja a las claras que no están capacitados para ello, o que no están a gusto en el club ni tienen ganas. La culpa de ponerlos es del entrenador. La culpa de sus cualidades del jugador.


Pero el que gasta dinero irresponsablemente en traerlos y tenerlos en la plantilla es de los dirigentes y esos no pueden esquivar su responsabilidad en el club, corriendo cortinas a cada problema, sin dar la cara en las malas. Ya que roban al club en las buenas y las malas, y salieron corriendo a la foto y las entrevistas el año del Doblete Europeo, que ahora den la cara y no se escondan en Caminero para ocultar sus tejemanejes en el Atlético de Madrid, club que por desgracia es de su propiedad si nadie lo remedia y lo compra.


- Punto 3: Caminero


Jose Luis Pérez Caminero es una simple marioneta de los Gil, no es ni más ni menos que un empleado más a sueldo del club, con el único incentivo de que lleva traje y corbata. Entiéndase. Es el Director Deportivo más controlado de la Primera División Española. No tiene libertad ni poder de decisión en los fichajes. Tan sólo se limita a presentar una lista de jugadores para las posiciones a reforzar, que Gil Marín y Cerezo se decidirán a fichar al que mayor comisión de traspaso deje en las cuentas personales del Presidente y del Consejero Delegado. Alguien con un poquito más de orgullo, hubiera puesto sus condiciones, o les hubiera dejado con la vergüenzas al aire.

Por desgracia, ver a Caminero en rueda de prensa es ver a una marioneta que va con la lección aprendida, que recita de memoria el papel que le pusieron por delante sus jefes. Ver a un símbolo del Doblete como él trabajando así da pena, empequeñece el corazón y el alma atlética. Sin embargo, el buen trabajo en sintonía que realiza con Pantic y con Aguilera, con el fútbol base atlético, dan motivos de sobra para creer que si le dejaran trabajar con tiempo y con sus ideas, Caminero podría hacer buenas cosas. Ahora es tan sólo una marioneta que ni siquiera trinca, no cómo el antecesor Suso García Pitarch, grande conocido por sus fichajes de Seitaridis, Eller, Clèber, Juanito o Cabrera.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Twittear