La final. Bom Jogo!

Perdonen mi ignorancia de la lengua de Magalhaes, Coelho y otros grandes personajes portugueses. Uno hace lo que puede en honor a lo que va a suceder dentro de hora y media en Dublín. La capital de la Isla Esmeralda recibe con los brazos abiertos al Sporting de Braga (sorprendente finalista tras eliminar al Benfica) y el Oporto (finalista tras superar la final anticipada ante el Villarreal). Y es que los cuatro semifinalistas, equipos ofensivos y alegres en el juego podían depararnos finales muy intensas y atractivas. Pero la de hoy es la más sorprendente de las posibilidades que había entre los 4 candidatos.

Primero, porque el Braga nos ha privado del clásico portugués en una final europea. Benfica y Oporto se tienen muchas ganas, pero esta vez el Braga, el equipo de Domingos Paçiença, se ha colado como ya hizo el año pasado el Fulham en la cita de Hamburgo. Los de Braga vienen haciendo historia, y pretenden seguir soñando hoy. El año pasado entraron por primera vez en la Champions League, donde tuvieron que superar una ronda previa muy fuerte contra el Sevilla, y en la que dieron la campanada por completo. Tras el ajustado 1-0 de la ida, el 3-4 con el que golpearon en el Pizjuan sonaba a dura advertencia para la Champions. Y casi logran la machada de entrar a octavos. Su victoria por 2-0 sobre el Arsenal les concedía muchas opciones de entrar a octavos en la última jornada, a pesar de su mal comienzo (6-0 en el Emirates y 0-3 en casa ante el Shakthar). El Shakthar los colocó los pies en el suelo y les envió a la Europa League como tercer clasificado.

Tras superar a Lech Poznan, Liverpool, Dinamo Kiev y Benfica; el Oporto de Villas Boas es el último objetivo del club Bragantino. Con medio equipo brasileño nacionalizado portugués, el Braga cuenta con un muy buen bloque. Destacan para mí Vandinho, en el doble pivote, Lima, extremo diestro y Hugo Viana, motor del equipo y rejuvenecido tras su fallido paso por Valencia y Osasuna. Todo un trotamundos del fútbol europeo, surgido de la inagotable cantera del Sporting de Lisboa. Sin duda, otra de las grandes referencias de este equipo es la pareja de Vandinho, Custodio, el líder, la referencia espirítual del equipo y el organizador de todo. Un equipo con un fútbol atrevido, rápido, vertical. Y que ha ido progresando mucho con el paso de los años. Hoy está ante su gran prueba.

¿Qué se puede añadir a lo ya dicho por otros sobre el equipo de Do Dragao? El equipo de Villas Boas ha llegado a recibir loas tan gratificantes y tan señaladas como la recibida por Axel Torres en su programa Marcador Internacional, en Radio Marca. "Más allá del Barcelona y del Arsenal, si tenemos que señalar tres equipo que practiquen un futbol atractivo para el espectador, destacamos al Lille, al Borussia Dortmund y al Oporto". La comparación con el FC Barcelona puede parecer atrevida, pero nada más lejos de la realidad.

Los números hablan por sí sólos. 84 puntos en 30 partidos. Tan sólo ha concedido 3 empates en Liga. 21 puntos de ventaja sobre el Benfica, segundo clasificado. Equipo más goleador y menos goleado de la liga portuguesa. Sólo la eliminación en Copa Portuguesa a manos del Benfica ha evitado un dominio mayor de los dragones tras una campaña 2009/2010 decepcionante. La fortaleza del Oporto reside en su tremenda profundidad de plantilla. Hoy juega con el once de gala, a excepción de Fucile. Véase Helton; Sapunaru, Rolando, Maicon, Alvarito el Mono Pereira; Guarín, Fernando, Moutinho; Varela, Falcao, Hulk. Y en el banquillo gente como Otamendi, Belluschi, Ruben Micael, Walter, Cebolla Rodríguez. El equipo vende y vende futbolistas a buen precio cada año y siempre se refuerza barato y bien. El Oporto se ha convertido en un pequeño trampolín para todo aquel que quiera hacer carrera en un grande de Europa. Y todo es fruto de su trabajo bien hecho y la buena planificación, aparte de la magistral mano de Villas Boas, el entrenador con más futuro en Europa, y que ya se le compara con su compatriota José Mourinho.

A 1600 kilómetros de Oporto se celebra la final en Dublín. Dos equipos portugueses y un árbitro español, una fiesta ibérica en toda regla. Sólo 50 kilómetros separan ambas ciudades. La ilusión en ambas es enorme. El Oporto ya conoce estas finales y las mieles del triunfo. En 2003 ganó la UEFA Cup en Sevilla ante el Celtic de Glasgow por 2-3, con los Mourinho, Deco, Carvalho, Paulo Ferreira, Nuno Valente, Baia, Derlei, Maniche, Costinha y etc. en el equipo. Al año siguiente fueron campeones de Europa ante el Mónaco. Para el Sp.Braga es la primera, y esperan que no sea la última ni volverse de vacío. Un bonito espectáculo nos espera en el AVIVA Stadium de Dublín (el antiguo Landsdown Road). Hace un año y 6 días, el Atlético de Madrid se proclamaba Campeón en Hamburgo. El todavía campeón no ha podido revalidad ni defender su corona como es debido, y ahora uno de los dos equipos del país vecino buscan la gloria, quieren ser el sucesor del At.Madrid.