La vuelta...Todo o Nada

0-2. Ventaja parcial para el FC Barcelona tras el primer asalto de la eliminatoria. Ni mucho menos acabada, pero sí muy definida para los catalanes. Definida porque a priori es complicado remontar un resultado favorable a un Barcelona tan descomunal en cuanto a juego en los últimos años. Definida porque el Madrid sigue barruntando sobre el arbitraje de la ida, mientras en Barcelona priorizan el juego a la protesta, aunque también protesten y recurran al engaño al árbitro de vez en cuando. Definida porque el Madrid necesita el partido perfecto a su favor y el partido tonto del Barcelona para hacer 3 goles que lo clasifiquen para Londres.

No se vislumbra como Misión Imposible, pero desde luego que los conceptos de uno y otro para la ida han cambiado radicalmente. El Madrid buscó el empate a cero, y si no media la controvertida expulsión de Pepe, bien estaríamos hablando de otro partido y otra eliminatoria. El FCB no andaba muy descontento con el empate, sabedor de que la vuelta la tenía en casa y que un gol era suficiente para pasar la eliminatoria. Un gol, con continua posesión, como hizo en el Bernabeu, podía caer en cualquier momento. Jugar media hora con un hombre más y volverse con el empate a cero hubiera sido una gran oportunidad de sentenciar desaprovechada por los culés. Así lo entendió Messi, y todos los demás. Avanzaron líneas en el campo, se asociaron y movieron la pelota con rapidez, uno - dos toques y traslación, nada de conducciones, búsqueda de la zona con superioridad numérica siempre. Apoyos constantes y movilidad, ritmo acelerado en los últimos metros. Afellay por el tocado Pedro fue el golpe de gracia. Afellay se la puso a Messi para el 0-1. Messi se inventó el 0-2 en una de sus espectaculares arrancadas.

Y hoy nos encontramos con el último capítulo del serial de 4. Papeles cambiados. Al Barcelona no le interesa arriesgar nada. El Madrid se la juega totalmente. La eliminatoria ahora mismo pende de un hilo que se sostiene por un lado por Casillas, que debe guardar su portería a cero sea como sea. En el extremo opuesto, el acierto del Madrid. Si marca en los primeros compases del partido el 0-1, hay eliminatoria. Si tarda en hacerlo, puede que la historia ya está definida. Es la Hora Cero. El Madrid tiene que demostrar su leyenda urbana de la pegada. La pegada que le sostiene contra los pequeños es la que hoy debe aparecer para tumbar al Barcelona. La contra no le vale, tendrá que ser protagonista. Benzemá, Özil, Ronaldo y Di María, con Lass y Alonso suena bien. También las subidas de Marcelo, y alguna aparición de Arbeloa. Quizás mejor si el punta es Higuaín, más peleón, más trabajador. Benzemá necesita espacios y será difícil que hoy los tenga en el Camp Nou. Y en cuanto pierda la pelota, hay que presionar rápido, ser reactivo, para buscar recuperación inmediata. No esconderse. Ir a buscar el partido y el balón. Disputar y ganar el centro del campo para el Madrid es vital esta noche. El Barça querrá apretar y recuperar rápido para dormir el partido con la posesión, no sabe defender sin balón, y nadie le ha puesto en el aprieto de dejarle sin balón todavía. Aprieta con intensidades de Premier League, mucho más altas que las de España. Y a eso le suma su técnica y su calidad individual, muy diferencial con muchos equipos. No deja pensar, enciman 2 y hasta 3 en recuperación, los demás tapan líneas de pase. Si el Madrid sabe interpretar donde está su hombre libre (generalmente con cambios de juego lo encontrará), puede asegurarse más posesión y hacer sufrir al Barcelona de verdad. Tal y como hizo el año pasado en liga con Pellegrini. Si no, el partido andará más cerca del 5-0 de este año en liga que del milagro de Barcelona y el pase a Londres. Eso si no matan el partido con faltas y bajo ritmo, lo cual es sinónimo de rendición blanca y victoria blaugrana.