Copa América. Jornada 3

Voy a tratar de ser breve, porque aún debería darme tiempo a analizar los dos partidos de esta noche de cuartos. Las favoritas despiertan. Algunas con más impetú que otras, cada una con su peculiaridad. Las tres invictas, las tres con los mismos puntos. 5 puntos. 2 empates y 1 victoria. Y sin embargo sólo Brasil es la única de las tres, junto con Uruguay y Argentina, que pasa como primera de grupo.

Grupo A:

Argentina metió cambios respecto a lo visto frenta a Bolivia y Colombia. Argentina, ante la que se podía avecinar, y en frente de la Costa Rica de Ricardo La Volpe, no se fiaba. El país se ponía en el peor de los casos para estar preparado para la dureza del reto. Aunque finalmente no fue tanto. Argentina, con sólo Mascherano y Gago en el centro del campo, fue mucho más fluida que en el atasco Cambiasso - Mascherano - Banega. Una opción más por delante, y una mejor ocupación de las bandas, con un Messi que partía por derecha y acababa por donde quisiera. Libertad absoluta para el crack. Y el crack fue más efectivo. Igual de presente, y más efectivo. 2 asistencias de gol certifican esa efectividad de La Pulga. Zabaleta tenía espacio que recorrer y Argentina no estaba tan encorsetada. Costa Rica, a excepción de Joel Campbell, no fue tan fiera como la pintamos y perdió claramente por 3-0. 2 goles del Kun, que anda entre dos mares con el revuelo que está creando con sus declaraciones sobre su futuro, y otro de Di María, que no anda con el río en calma tras pedir su renovación.

Colombia es la líder del grupo, avasalló sin piedad a Bolivia y los cafeteros ya están en cuartos de final, donde se medirán a Perú. Tranquilidad absoluta para una selección que llega como tapada, pero al igual que Chile, va a dar más de un susto en esta Copa América. El cruce parece favorable, para que a priori, entren en semifinales. Luego lo que dicte el campo de juego es otra historia.


Grupo B:

A Brasil le costó mucho más entrar, y por paradojas del destino, no sólo entra en cuartos, si no que lo hace como primera y cruza contra la tercera de su propio grupo, Paraguay. Cosas de la organización del torneo, bastante mejorable, todo sea dicho. Decisivo, muy decisivo, aquel gol de Fred en los últimos minutos frente a Paraguay para lograr el empate, lo que al final decantó la balanza a favor de la canarinha. Ha sido el signo de Brasil en esta fase de grupos. Sufrir, trabajar, currar.

Sufrió de nuevo contra Ecuador. Caicedo hizo estragos en la zaga brasileña y anotó dos goles. Uno de puro delantero, controlando de espaldas, girando bien sobre su eje, y metiendo bien el cuerpo para ganar la posición de cara a puerta sobre el defensa. Y el otro un disparo seco que Julio César no atrapa. Canta bastante el meta del Inter en el gol. Sin embargo. Brasil siempre iba por delante. Primero Pato, con un tremendo cabezazo a un gran pase desde 3/4 de campo del zurdito del Fenerbaçhe turco, André Santos. Algunos en sus crónicas lo pusieron como un centro puesto por vaguería. Y a mí me parece un centro sensacional, entre un portero adelantado, que da un paso adelante para achicar y rectifica porque ve que no llega. Suicidio del portero. Y una zaga que no espera el pase ahí. El desmarque de ruptura de Pato, sorprendiendo y entrando en carrera, y ese leve giro de cuello hace lo demás. Sólo había que direccionarla, no darle fuerza. Para mí el mejor gol del campeonato hasta el momento por la belleza técnica de centro y remate, y por la rapidez de la acción. Me recuerda al gol de Ander Herrera en la final de la Euro sub 21. Centro de Montoya de idéntica posición, y gran remate de Ander entrando en carrera.

Luego otros dos de Neymar, y otro gol de Pato, permitieron a Brasil ganar, en un partido loco, donde Ganso tuvo espacios y pudo jugar más cómodo para hacer a Brasil más fluida. Ganso con espacios es más letal, y así lo demostró. Nada nuevo bajo el sol con este futbolista del Milán, es el jugador sobre el que gira todo en Brasil.

Por la otra parte del grupo, Venezuela y Paraguay empataron. Paraguay se dejó ahí dos puntos de forma estúpida, o Venezuela arrancó un punto vital. Según se mire. Mérito tienen los primeros 60 minutos de Paraguay, que controló el partido a su antojo y se colocó 3-1 a favor, con calma y tranquilidad para manejar el partido una selección tan bien organizada como la guaraní. Pero Venezuela demuestra que ha crecido en su fútbol. Con Arango, Rondón y Miku, sus mayores exponentes, sin estar del todo bien, la Vinotinto creció en el juego a partir del 60, se lanzó con todo y empató el partido. Yohanndry Orosco y Tomás Rincón son los motores de este equipo. El primero deslumbó a Europa y medio mundo en el Sudamericano sub 20 de enero, y se ganó una plaza en esta Copa América tras sus 6 primeros meses en Alemania. Meza es otro hombre importante para los de César Farías, y así fue como Venezuela, a través del canal de juego que supone Orosco igualó a Paraguay para entrar en cuartos.

Grupo C:

Uruguay se la jugaba. Con Chile acariciando el pase, la celeste tenía frente a México, colista con 0 puntos, un partido trampa. Los mexicanos venían al torneo con una selección sub 22, tras ganar la Copa de Oro con los buenos de verdad. Sólo Gio Dos Santos, uno de los importantes, estaba en la Copa América. Pero los niños mexicanos también la tocan y no querían defraudar, menos tras el exitazo de los Espericueta y compañía en su Mundial sub 17, donde fueron campeones frente a Uruguay. Los charruas salieron intensos, y encontraron en una falta botada por Forlán un balón de oxígeno tremendo. Centro de Forlán, balón muerto para Pereira, que remató dos veces. Una contra el portero y la otra dentro. El Mono, siendo jugador de banda, muchas veces actuando como lateral zurdo, es el máximo goleador de Uruguay en la competición. Si repasas la alineación del Maestro Tabarez, te das cuenta de la importancia de los Pereira en el equipo: Muslera; Coates, Lugano, Maxi Pereira, Álvaro Pereira; Arévalo Ríos, Diego Pérez, Cebolla Rodríguez, Álvaro González; Luis Suárez y Diego Forlán.

Uruguay no bajó el pistón y fue un poco más que México. Tuvo más ocasiones pero las desaprovechó, y Mexico no quería ser menos que la celeste. Los aztecas buscaron la igualada, apurar sus opciones de pasar a cuartos de final como fuera. Uruguay se llevó un susto al final, cuando Pacheco anotó gol a falta de 10 minutos, pero anulado por fuera de juego. Hubiera sido cruel, pero Uruguay no está fuerte atrás, y lo que arriba le cuesta sin los goles de Forlán y Suarez ni la aportación de Abreu o Cavani, no lo puede perder atrás por despistes.

Chile fue la primera de grupo. Ganó in extremis a una Perú que de la mano de Markarian está mejorando sus actuaciones en los últimos años. Es un grupo sólido, compacto y bien trabajado, al que Chile sólo pudo meterle mano en una acción a balón parado. Sí, otra. Lleva 3 goles de 4 en acciones de estrategia. Esta vez una mala salida del meta peruano y un toque desafortunado hacia dentro de la portería hicieron el resultado final. Un gol de suerte para Chile, pero la suerte se trabaja. Una desgracia para Perú, que perdió la oportunidad de encontra a otro equipo en su camino hacia el título. Un gol que le quitó un punto y la posibilidad de haber sido primero de grupo.